viernes, 17 de junio de 2022

Guía para cultivar tomates en invernaderos

El tomate es uno de los alimentos más comunes y versátiles; además, es una cosecha que se puede presentar de manera óptima en climas adversos. Conozca en esta nota una pequeña guía para cultivar tomates en invernaderos y obtener excelentes resultados. 


El tomate es uno de los productos orgánicos más populares alrededor del mundo. Casi siempre se emplea como ingrediente base en infinidad de preparaciones, pero esto se debe a la versatilidad productiva que se da gracias a una serie de factores relacionados con el cultivo. El tomate es el fruto de la solanum lycopersicum (también conocida como tomatera), una variedad de planta herbácea presente en gran parte de Centroamérica que pudo extenderse a lo largo de todo el mundo debido a que suele adaptarse con facilidad a distintas condiciones atmosféricas. En Agropinos queremos enseñarle cómo cultivar tomates en un invernadero, ya que esta puede ser una buena opción a la hora de decidir qué plantar dentro de este tipo de espacios.

 

Suelo y clima

 

Aunque las tomateras suelen adaptarse a espacios difíciles en los que otro tipo de plantas no lo harían, estas pueden adecuarse mejor si se generan las condiciones más idóneas para su crecimiento. Las heladas son uno de los principales riesgos a evitar, las bajas temperaturas afectan la piel sensible del fruto, por lo que los invernaderos son los espacios más adecuados para sembrar tomates con éxito sin importar el clima que predomine en la región. 

 

Estos son los factores climáticos a tener en cuenta durante todo el cultivo de tomates:

 

- La temperatura: aunque existen distintas medidas óptimas que beneficiarían la producción del tomate, el rango climático necesario debe mantenerse entre los 25 °C y los 12° C sin llegar a estar por debajo de los 7 °C.

 

- La humedad: los tomates suelen necesitar ambientes que no superen el 70% de humedad debido a que esto podría llegar a generarle afectaciones al cultivo.

 

Como lo que se busca es recrear el espacio más idóneo para el crecimiento de tomates, es importante buscar suelos que cuenten con estas características:

 

- El ph del suelo debe ser lo más neutro posible, es decir que la acidez debe estar dentro de un rango de 7 sobre 14. Aunque no es tan fácil mantener un control de esta acidez, emplear durante el riego agua en su estado más puro puede ayudar a neutralizar estos niveles.

 

- La materia orgánica presente en los componentes del suelo debe estar dentro del 2% del contenido total. El compost es un buen método para fortalecer con nutrientes el lugar donde se cultiva el tomate, aunque actualmente existen en el mercado distintos productos para el agro que hacen más eficiente esta labor.

 

Tipos de tomates

 

Existen aproximadamente 25 variedades de tomates que se han producido tanto natural como artificialmente y que responden a las distintas regiones en las que este producto ha sido plantado. Antes de acercarse al proceso de cultivo es importante informarse sobre estas variedades y decidir cuál es el más conveniente a elegir de acuerdo a este tipo de preguntas: 

 

- ¿Qué tan elevada es la producción?

- ¿Qué variedades son más resistentes a plagas y enfermedades?

- ¿Cuáles se adaptan mejor a todo tipo de suelos?

- ¿Cómo es su aspecto? (en términos de color y tamaño)

- ¿Qué sabor tiene?

 

Para el caso de los invernaderos, las especies que más se adaptan a las condiciones que este espacio ofrece son: 

 

- El tomate Caramba: ofrece una gran producción de tomates de gran tamaño en muy poco tiempo.

 

- El tomate Cabrales: también genera una alta producción, pero sus tiempos de crecimiento inicial son más extensos.

 

Marco de plantación

 

El marco de plantación corresponde al espacio que se dispone dentro del invernadero  para la siembra del tomate. Ese espacio es variable, puede ir desde 0,3 m entre plantas y 0,5 m entre filas, todo depende de las características y propiedades específicas del suelo. Las raíces de la tomatera no alcanzan a penetrar el suelo en profundidad debido a que tienen cerca los nutrientes que necesitan, por lo que sin importar el marco de plantación siempre habrá una buena relación entre las plantas que hagan parte del cultivo.

 

Cuánto regar

 

Una tomatera requiere una alta dosis de humedad debido a que la tierra seca podría deteriorar la calidad del cultivo, por tal motivo el riego debe realizarse constantemente. Lo más viable es implementar dentro del invernadero sistemas de riego que se encarguen de proporcionarle a las plantas el agua necesaria dentro de los tiempos más acordes. Es importante tener en cuenta que la dosis de riego va a variar durante todos los meses del año, esto dependerá de las condiciones climáticas y la filtración de líquidos con la que cuente el suelo.

 

En Agropinos tenemos distintos insumos para invernadero que le facilitarán los procesos de cultivo de su plantación. Contáctenos para que pueda conocer nuestros productos y así ofrecerle siempre el mejor servicio. 


Artículo tomado de: Agropinos Insumos Agrícolas

jueves, 9 de junio de 2022

¿Para qué se usan las geomembranas en los invernaderos?

Conozca en esta nota qué son las geomembranas, cuál es su importancia y por qué implementarlas en su invernadero. Agropinos le aconseja sobre el tipo que más se adecúe a sus necesidades. Infórmese aquí. 


Las geomembranas se caracterizan por ser elementos que se adaptan a las necesidades y presupuestos de cada proyecto, sea minero, medioambiental o agrícola. Gracias a ellas, puede lograrse una resistencia mecánica en los procesos, además de ser objetos permeables y con alta durabilidad cuando son usadas. 

 

Si aún no las conoce, en Agropinos le explicamos de manera amplia qué son, las utilidades que se les da y aplicaciones en sus cultivos e invernaderos. ¿Le interesa? Siga leyendo.

 

¿Qué son las geomembranas?

 

Las geomembranas son productos para el agro compuestos de una lámina impermeable fabricada de distintas resinas plásticas, siendo las más comunes de neopreno, PVC, polietileno de distintas densidades, caucho o etileno. Además, pueden poseer distintos espesores y cualidades físicas y químicas, de acuerdo a su material y uso. En este artículo se hará énfasis en las geomembranas de PVC y polietileno.

 

Asimismo, están diseñadas para impedir el paso de sustancias y materiales como líquidos y vapores, fuera de la barrera que tiene, justamente con el fin de que no se produzcan riesgos medioambientales y ayuden a tener un mejor control sobre los agentes contaminantes. 

 

Tipos de geomembranas 

 

- Geomembranas de PVC: están fabricadas por un material químico compuesto, que contiene carbono, hidrógeno, cloro, derivados del petróleo y sal. Su resistencia a las condiciones climáticas, a factores químicos, térmicos y físicos, además de su ligereza hacen que sean un producto interesante e ideal al momento de emplearlo como plástico de invernadero.

 

- Geomembranas de polietileno: este material posee distintas densidades, pero el que posee más demanda y usos en el sector del agro es el de alta densidad. Esto se debe a su alta resistencia a los productos químicos y a los rayos ultravioleta. Adicional a esto posee una gran durabilidad e impermeabilidad, lo que hacen de este un buen producto a la hora de proteger cultivos bajo invernadero, ya sea complementando la recolección de agua en sistemas de riego, o almacenamiento de líquidos.


- Geomembranas de polipropileno flexible (FPP): este tipo se caracteriza por ser muy resistente a la intemperie y a la exposición de rayos UV, aparte cuentan con una excelente estabilidad dimensional y permiten un gran control de calidad en su instalación. Sin embargo, estas geomembranas tienen menor densidad, pues en los paneles pueden desplegarse fácilmente y su tasa de transmisión de agua es más baja.

 

- Geomembranas de terpolímero de etileno propileno dieno (EPDM, EPDMR): estas se adaptan perfectamente a las temperaturas extremas, son resistentes a la intemperie, al ozono y radiación UV, además se consideran muy flexibles y de rápida instalación, gracias a que las juntas de los paneles cuentan con bandas autoadhesivas. Por otro lado, estructuralmente sus moléculas están reticuladas, de manera que son elásticas y estables químicamente en comparación a otras geomembranas.

 

- Geomembranas de polietileno clorosulfonadas (CSPER): son insensibles a los ataques degradantes, a los rayos UV y al oxígeno, aunque se consideran estables dimensionalmente, resistentes a la intemperie y a una amplia gama de químicos. Una particularidad que tienen es el tipo de conservación con la que cuenta, pues por su flexibilidad puede soportar incluso condiciones de congelamiento..

 

Tal vez le interese: El papel de las geomembranas en su cultivo

 

¿Cómo instalar una geomembrana?

 

1. Preparación del soporte 

 

El soporte indica el sistema de impermeabilización que va a utilizarse, por lo cual influirá en la vida del mismo. Entonces, para obtener una impermeabilización adecuada en un embalse o vertedero deberemos:

 

- Tener en cuenta que el material del soporte sea igual que la granulometría continua, con el fin de no ocasionar ausencia de tamaños grandes que puedan ocasionar punzonamientos. 

 

- Ahora bien, si el sistema es compacto, tendrá que alcanzar el 95 % de energía en el proctor del suelo utilizado, tanto en el fondo del vaso como en los taludes. 

 

2. Propiedades de la geomembrana

 

Para esta parte, será necesario elegir el tipo a instalar, sea de alta o baja densidad. Aunque, preferiblemente hay que escoger una base homogénea y fuerte, así la impermeabilización dependerá:

 

- La preparación del soporte (tipo de árido).

 

- Protección de la membrana (tipo de geotextil).

 

- Tipo de residuo.

 

- Altura total del relleno del vertedero o agua del embalse.

 

3. Colocación de la geomembrana

 

Su instalación y extensión se deberá realizar de forma continua. Asimismo, se tendrán que ubicar en los taludes y bases de manera diferenciada e independiente. Luego, una vez puestas las láminas, tocará soldarlas vigilando que su temperatura sea la misma para evitar tensiones. Eso sí, las operaciones de cierre de base, talud y anclaje de obras se efectuarán en las horas más frías del día. 

 

Básicamente, sus pasos de colocación son:

 

- Extensión y numeración de los paños.

 

- Anclaje provisional de los mismos.

 

- Soldadura y numeración.

 

- Verificación de soldaduras.

 

- Anclaje definitivo.

 

Tenga en cuenta que en ningún momento debe manejar tráfico que no esté controlado por la maquinaria sobre la geomembrana, pues se necesitará la protección precisa para el proceso de instalación.  

 

Usos y aplicaciones de las geomembranas 

 

Las geomembranas, aparte de su uso en la agricultura y ganadería, son utilizadas en el sector minero, y en construcciones, como lo mencionamos anteriormente, además funcionan a menudo como sistemas de revestimiento, en depósitos de líquidos, canales y embalses, estanques y tanques, y trabajan en conjunto con las mangueras de riego en los cultivos.

 

En síntesis, una geomembrana, dentro de sus cultivos, funciona para proteger sus cultivos, construir un invernadero, crear pozos de agua artificiales, proteger fuentes de agua, crear canales que circulen el vital líquido, impermeabilizar los suelos y recubrir tanques de almacenamiento.

 

Por eso, en Agropinos le ofrecemos las geomembranas de la más alta calidad para estos y todos los usos que necesite, además de muchos otros materiales como insumos para invernaderos con el fin de que le brinde un resguardo y desarrollo a sus cultivos del mejor modo, alcanzando con ellos los más altos estándares de productividad y calidad.


Artículo tomado de: Agropinos Insumos Agrícolas