martes, 26 de julio de 2022

Razones por las cuales cultivar lechuga en su invernadero

¿Sabía que la lechuga es uno de los mejores productos para cultivar en invernadero? Conozca en esta nota los motivos por los que es uno de las mejores plantas para cultivar, sus beneficios y características más importantes. 


La lechuga es una de las plantas herbáceas más cultivadas en toda clase de invernaderos alrededor del mundo debido a que tiene una producción constante durante todo el año y no requiere de demasiados cuidados para su conservación. Si lo que busca es un cultivo abundante que crezca rápidamente y le permita minimizar los tiempos de siembra y cosecha, la lechuga es su mejor opción. Hoy en Agropinos le contamos todos los beneficios de este tipo de plantaciones y cuáles son los aspectos que debe tener en cuenta para mantener siempre en las mejores condiciones su cultivo de lechuga en invernadero.

 

Características del cultivo de lechuga

 

Para cultivar correctamente una planta de lechuga, es indispensable tener presentes los tiempos de germinación de la semilla. Luego de los primeros 30 días, la lechuga debe contar con aproximadamente 8 cm de altura y un promedio de 5 o 6 hojas que garanticen su crecimiento una vez se realice el transplante directamente al suelo del invernadero. Este proceso dependerá del tipo de lechuga que se cultive y la calidad del suelo con el que se cuente para su posterior crecimiento, lo más aconsejable es contar con un terreno ligero con un buen sistema de drenaje cuyo ph esté entre 6 y 7, es decir, que sea neutro. 

 

Contrario a otros cultivos de fácil producción, la lechuga se caracteriza por su resistencia a los cambios de temperatura, esta puede adaptarse a entornos de sombra, pero adquiere muchos más nutrientes recibiendo luz directa, es decir que la temperatura óptima en la que se produce el cultivo estaría entre 30 °C y 8 °C. Con respecto a la humedad, es importante mantener un control que le permita a la planta adquirir la cantidad de agua necesaria para su crecimiento por lo que el valor de humedad total debe mantenerse entre el 60% y el 80%. Para el caso de los invernaderos se recomienda implementar sistemas de riego que mantengan el suelo húmedo sin llegar a generar encharcamientos que favorezcan la aparición de hongos en la planta. 

 

Tipos de lechuga

 

Aunque la mayoría de lechugas que se cultivan requieren de los mismos cuidados para su posterior crecimiento, dependiendo del tipo de lechuga que se cultive pueden variar algunos factores que afectan directamente los tiempos de cosecha y la calidad final del producto que se vaya a recolectar. Según el tipo de hojas que presenten, las lechugas se pueden clasificar en los siguientes grupos:

 

- Lechuga beluga, de hojas juntas que se van superponiendo hasta formar lo que se conoce como cogollo. Este es el tipo más común de lechuga y se caracteriza por tener hojas gruesas y crujientes de poco sabor que retienen una gran cantidad de agua. 

 

- Lechuga romana, de hojas más sueltas y alargadas que se extienden a través de un tallo central grueso. Se caracteriza por un sabor amargo y suele emplearse principalmente en la preparación de ensaladas y otros platillos culinarios. 

 

- Lechuga francesa, de hojas más suaves y encrespadas, con una textura fina y ligeramente mantecosa que mantiene un sabor intenso y delicado. 

 

- Lechuga batavia, de hojas similares en forma y consistencia a la lechuga francesa con la particularidad de presentar un color rojizo en las puntas que puede extenderse a lo largo de toda la hoja. Esta característica la convierte en uno de los tipos de lechuga más llamativos. 

 

Dependiendo del tipo de lechuga que elija para cultivar en su invernadero, las condiciones del espacio pueden facilitar el ciclo de la lechuga en su proceso de crecimiento. Es más rentable cultivar lechugas beluga, por ejemplo, debido a que sus hojas no se extienden demasiado y puede aprovecharse mucho mejor el terreno, pero la lechuga bativa, que requiere más cuidados, es más cotizada dentro del mercado alimenticio. 

 

Beneficios y rentabilidad

 

Como ya se ha mencionado, una de las principales ventajas de este cultivo es que la época de siembra de la lechuga es variable y puede producirse durante todo el año por su alto nivel de adaptabilidad, este factor es importante debido a que resulta más rentable para un invernadero este tipo de planta, ya que se busca mantener una regularidad en los tiempos productivos. Asegúrese de contar con todos los insumos para invernadero, pues es necesario para garantizar los cuidados de su cultivo. Para el caso de la lechuga, un riego constante sin necesidad de ser intenso es fundamental para la correcta nutrición de las plantas evitando que aparezcan plagas y hongos que puedan afectar las hojas del cultivo. Recuerde que en el mercado global, la calidad de los productos que se cultiven es uno de los factores determinantes para asegurar el éxito de la cosecha y entre mejores sean las condiciones de siembra, mejores resultados habrá al momento de la recolección. 

 

Si busca proteger su cultivo, en Agropinos contamos con tela para invernadero, entre otros insumos totalmente certificados que podrá emplear para mejorar la rentabilidad de sus productos. Somos una empresa líder en el abastecimiento de implementos para todo tipo de invernaderos del área agrícola, ¡no dude en contactarnos, estamos siempre dispuestos a brindarle un buen servicio!


Artículo tomado de: Agropinos Insumos Agrícolas

lunes, 11 de julio de 2022

¿Qué rentabilidad tiene la plantación de arándanos en invernaderos?

La plantación de arándanos es una de las más rentables, conozca en esta nota los motivos, las características de su cultivo y un par de consejos para cosechar y obtener excelentes resultados con este producto. 


Los arándanos son un tipo de baya muy popular alrededor de todo el mundo. El sabor concentrado y dulce que ofrece esta fruta del bosque, sumado a su piel frágil que genera una textura suave al paladar, han hecho de este fruto de arbusto uno de los más codiciados en todas las temporadas del año. Aunque el cultivo de arándanos se da en distintos climas fríos y boscosos, es posible recrear el ambiente propicio para la producción de estas plantas por medio de un invernadero. En Agropinos queremos que conozca todo lo que necesita saber sobre la plantación de arándanos en invernadero, ya que es uno de los cultivos más rentables debido a la alta demanda que ha tenido en los últimos años.

 

Características del cultivo

 

Los arbustos en los que crecen los arándanos suelen ser de contextura media si se cuidan adecuadamente durante sus dos años de crecimiento. Luego de este tiempo, los frutos se extienden por toda la superficie de las ramas, facilitando así una cosecha manual que garantiza la calidad del producto debido a que se pueden seleccionar personalmente los arándanos que destaquen por tener las mejores cualidades del fruto. 

 

El cultivo de la planta de arándano se puede realizar en producciones que llegan a alcanzar las 8 cosechas. Su ciclo productivo comienza en la época primaveral y se extiende hasta entrar en un estado de reposo durante la temporada de invierno, pero en climas poco variables como el de las zonas tropicales su producción es continua. Debido a esta estabilidad climática, actualmente en la región se ha visto un incremento significativo en la plantación de este producto, siendo este uno de los principales beneficios de los arándanos a la hora de ser considerada como una opción viable dentro de las plantaciones que se realizan en un invernadero. 

 

Requisitos para cultivar

 

Lo importante de un cultivo de arándanos es proporcionar las condiciones climáticas necesarias para que este fruto se dé y la planta no se mantenga en un reposo vegetativo. En zonas frías y húmedas, la temperatura atmosférica debe mantenerse entre los 25 y los 30 grados centígrados, aunque esta temperatura cambia respecto a la variedad de arándano que se decida cultivar. Independientemente de esto, tenga siempre en cuenta que el tamaño de la planta, la calidad del fruto y su época de productividad dependerá de los cuidados que se le brinden dentro del invernadero. 

 

Al ser arbustos de un mediano tamaño, las plantaciones de arándanos son propensas a sufrir daños con ventiscas o climas tempestivos, la fuerza de estos siniestros pueda hacer que los frutos y las hojas se caigan y se pierda la cosecha, por lo que es recomendable cubrir todos los espacios con una buena tela para invernadero que recubra al cultivo durante estas temporadas inhóspitas. 

 

Con respecto a las condiciones del suelo, los arándanos necesitan suelos ácidos que cuenten con un alto porcentaje de materia orgánica. Para lograr estas condiciones se aconseja cultivar pinos o árboles frondosos que le proporcionen residuos secos, pero si el suelo con el que se cuenta es demasiado neutro o alcalino, es necesario emplear productos para el agro que equilibren estos niveles. En cuanto al riego, este debe realizarse según la capacidad de drenaje con las que cuente el suelo, al momento de organizar el cultivo siembre la planta sobre montículos paralelos que reduzca la acumulación de agua sobre la tierra. En algunos casos también es común utilizar mallas para arándanos que le impidan a los pájaros y algunos insectos acercarse al fruto y arruinar la cosecha.  

 

Rentabilidad de las plantaciones

 

Como ya se ha mencionado, los arándanos son productos valorizados que cada vez se cultivan con mayor frecuencia alrededor del mundo, por lo que su rentabilidad depende de la calidad del fruto que resulte en cada cosecha. Para garantizar esto, los cuidados que reciba la plantación durante los dos primeros años de crecimiento son cruciales cuando de plantar arándanos se trata. Es necesario adecuar dentro del invernadero un sistema de entubado y riego que regule la hidratación de la planta para que a partir del quinto o sexto año se produzca la producción esperada. Este nivel de cosecha puede prolongarse a través de la vida útil de la planta, que está entre los 30 años si se mantienen bajo las mejores condiciones.

 

Las condiciones de producción genera que los arándanos tengan un precio de venta elevado, por lo que este fruto se recolecta manualmente con el fin de garantizar la calidad del producto. Una planta que ya se encuentre desarrollada puede llegar a producir 4,5 kilos de arándanos, pero la rentabilidad de esta cosecha depende de las hectáreas con las que cuente el cultivo. Se estima que en la región hay actualmente 450 hectáreas que cultivan arándano azul que podrían llegar a producir de 20 a 30 toneladas por año, una cifra significativa dentro del valor final al que puede llegar este producto dentro de mercados internacionales. 

 

En Agropinos contamos con distintos implementos para abastecer al sector del agro. Somos expertos en productos para invernaderos por lo que en nuestro catálogo podrá encontrar distintos insumos plásticos amigables con el medio ambiente necesarios dentro de los procesos de distintas plantaciones. Contáctenos y conozca todo lo que tenemos para ofrecerle. 


Artículo tomado de: Agropinos Insumos Agrícolas

jueves, 7 de julio de 2022

Bolsas para el agro

Las bolsas para el agro facilitan la siembra, crecimiento y traslado de las distintas plantas dentro del entorno del vivero. En esta nota le contamos cuáles son sus funciones específicas, sus utilidades y características más importantes. Entérese aquí. 


En la industria del agro se suelen emplear bolsas de cultivo que suplen distintas necesidades dentro de plantas que se encuentran en su estado de crecimiento. Diseñadas como una alternativa a las macetas, estas bolsas pueden facilitar la siembra y el traslado de distintas plantas dentro del entorno del vivero. Este aspecto es esencial en el agro porque brinda una rotación eficiente que puede ser aprovechada para mejorar y fortalecer las plantas adecuándolas en distintos sitios según se requiera. En Agropinos queremos que conozca todas las características de las bolsas para vivero, ya que estas pueden resultarle necesarias para determinado tipo de plantación. 

 

Características de las bolsas para invernadero

 

Dentro de los productos para el agro, las bolsas de cultivo se utilizan para sembrar plantas de pocas raíces que se piensen disponer dentro de un invernadero. Contrario a las macetas más convencionales, estas bolsas brindan distintos beneficios gracias a su diseño simplificado que se caracteriza por: 

 

- La durabilidad del material en el que se fabrican garantiza una vida útil de hasta 36 meses gracias al aditivo U.V. La mayoría de las bolsas de cultivo se fabrican con materiales plásticos recuperados, pero también es posible encontrar en el mercado bolsas de tela que garantizan el drenaje, pero tienen menor eficacia.

 

- La aireación y el drenaje que le proporcionan a la planta las mejores condiciones, lo cual es fundamental para trasplantes o la siembra de plántulas en proceso de crecimiento. A diferencia de materas más herméticas, el flujo interno de las bolsas de cultivo le brinda a la planta los nutrientes necesarios para un óptimo fortalecimiento.  

 

- El tamaño ergonómico que facilita el traslado de las plantas así como su adecuación en espacios reducidos. La mayoría de viveros o invernaderos necesitan organizarse de tal modo que las plantas que se siembran puedan tener todos los cuidados que necesitan, por lo que el uso de las bolsas de cultivo podría hacer más eficiente esta adecuación. 

 

¿Cuál es su función?

 

Las plantas de un invernadero necesitan gozar de las mejores condiciones de crecimiento. Sin importar que se trate de tomates, lechugas o flores, las bolsas de cultivo le brinda a las plántulas un espacio óptimo en el que estas pueden fortalecerse y adquirir todos los nutrientes que necesitan antes de ser trasplantadas en la tierra. 

 

El material transpirable en el que están fabricadas estas bolsas beneficia el drenaje y la aireación. La circulación le garantiza a las plantas un crecimiento proporcional que no va a llegar a afectar las raíces, estas no van a necesitar extenderse por todo el recipiente intentando adquirir algunos minerales por lo que van a tener un mejor desarrollo. El sobre crecimiento de las raíces lleva a que estas se enreden entre sí, lo que obstaculiza la absorción de nutrientes y, por lo tanto, el cuidado de la planta.

 

Aunque la mayoría de las veces las bolsas de cultivo se emplean como una solución provisional dentro del proceso de siembra, en algunos casos es más viable mantener las plantas dentro de estos recipientes. Las flores, por ejemplo, requieren de riegos específicos así como de una temperatura óptima para su florecimiento, por lo que las bolsas para cultivo resultan ser el espacio perfecto para su desarrollo.

 

Beneficios de las bolsas para los cultivos

 

Al estar separadas por bolsas de cultivo, las plantas suelen tener un crecimiento más acelerado. Dentro de la tierra, algunos cultivos como los del tomate, compiten con las plantas de su alrededor por nutrientes, agua y luminosidad con la finalidad de mantenerse con vida. Todo lo contrario sucede con las bolsas de cultivo. La siembra que se realiza dentro de estos recipientes le genera a las plantas una comodidad adicional que se refleja en una producción más estable. 

 

Debido al flujo de sustancias que brinda una plantación en bolsas de cultivo, la retención de agua suele ser poca, pero la absorción de otra serie de sustancias, como lo podría ser un fertilizante, es mucho más eficaz. Si tiene pensado realizar este tipo de procedimientos le aconsejamos que se instruya sobre cómo llenar bolsas para vivero debido a que la disposición de la tierra es crucial dentro de la siembra de una planta.

 

Si se pregunta dónde comprar bolsa para vivero, en Agropinos le ofrecemos una amplia variedad de insumos para invernadero. Conozca todo lo que tenemos para ofrecerle. Estamos para brindarle el mejor servicio.


Artículo tomado de: Agropinos Insumos Agrícolas